La idea de que alguien corra alguna vez la legendaria distancia de los 42 kilómetros y 195 metros en menos de dos horas fue vista durante muchos años como un sueño imposible pero ahora, tras la evolución de los últimos años, muchos creen que la barrera terminará por caer algún día. Así lo indica una encuesta difundida por la página web del maratón de Fráncfort en la que participan tanto atletas de élite como directores de varias carreras europeas. Naturalmente, nadie cree que la barrera de las dos horas vaya a romperse de la noche a la mañana pero todos apuntan a que la evolución va en esa dirección.
El actual récord mundial lo tiene el keniano Dennis Kimetto que corrió en Berlín 2:02:57 en 2014. Kimetto, por lo demás, también tiene el récord de los 25 kilómetros con 1:11:18, lo que implica un ritmo que hace pensar que bajar de las dos horas en el maratón está dentro de las posibilidades humanas.
El legendario Haile Gebrselassie, que batió dos veces el récord del mundo en Berlín y fue el primero en bajar de las 2 horas y 4 minutos, cree que algún día se romperá la barrera pero duda que sea en los próximos veinte años. "De verdad creo que llegará el día en que se romperá la barrera de las 2 horas. Tal vez no ocurrirá en los próximos veinte años pero alcanzaremos a verlo", dijo el atleta etíope en la encuesta.
El keniano Patrick Makau, que derrotó a Gebrselasie en Berlín en 2011 y de paso le arrebató el récord mundial al correr la distancia en 2:03:38, cree también que la barrera terminará por superarse. "Cuando veo la evolución en Kenia y los nuevos talentos que cada vez son mejores tengo la esperanza de que algún día veremos una marca por debajo de las dos horas. Naturalmente tardará un poco pero creo que terminará por suceder", sostuvo Makau.
El ugandés Stephen Kiprotich, oro olímpico en maratón en Londres y actual campeón del mundo, también es optimista al respecto y se apoya en la evolución que ha habido en los últimos años.
"Hubo una época en que nadie se podía imaginar que el récord bajara de 2:07. Desde que Paul Tergat en 2002 fue el primero, en Berlín, en correr por debajo de 2:05 los intervalos en que se rompe el récord mundial son cada vez más cortos", recordó. "Creo que la evolución apunta a que veremos un récord por debajo de las dos horas y Berlín puede ser el lugar donde eso ocurra", agregó.
En cuanto al tiempo que tardará en romperse la barrera de las dos horas el director del maratón de Viena, Wolfgang Konrad, es más optimista que Gebrselasie. "Creo que la barrera de las dos horas va a caer y me puedo imaginar que eso ocurra en los próximos diez años", dijo Konrad. El que logre romper esa barrera, según Konrad, será un corredor que venga de correr distancias más cortas y que logre traspasar la velocidad con que corre esas distancias al maratón.
"La evolución de los récords apunta en esa dirección. Por ejemplo, hoy el récord mundial de los 10.000 metros está en 26:17, lo que significa que para igualarlo se necesita correr 5.000 metros por debajo de 13:10. Alrededor de 1980 ese tiempo lo corrieron Henry Romo y Dave Moorcroft y lograron el récord del mundo", explicó.
Mark Milde, el director del Maratón de Berlín donde en los últimos años se ha roto un récord detrás del otro, cree que la barrera puede romperse en los próximos 15 años y que la evolución de las zapatillas deportivas va a ser clave en ese proceso. "Creo que la barrera de las dos horas se romperá algún día pero eso durará probablemente 15 años. Me puedo imaginar que la evolución de las zapatillas deportivas tendrá un papel en ello, al igual que la superficie en la que se corra", dijo Milde. "Espero que Berlín con sus buenas condiciones climáticas siga iendo parte de ese proceso", agregó. Mientras la élite piensa en la barrera de las dos horas, los atletas populares piensan en sus barreras más modestas y algunos sueñas con bajar al menos de las cuatro horas y otros, más ambiciosos, de las tres horas.
Fuente: 20minutos.es - EFE / RODRIGO ZULETA